El Madison Square Garden de Nueva York, fue el testigo principal de
la edición número 60 de Los Grammys americanos, la noche de ayer.
Espectaculares presentaciones, el regreso de algunos artistas al
escenario y concienciación por el abuso sexual fueron parte del
itinerario de evento.
El rapero Kendrick
Lamar, quien estaba nominado en siete categorías y se
acreditó cinco, fue el responsable de iniciar la gala con un
polémico performance, interpretando la canción “XXX”,
junto a U2 y Dave
Chappelle.
La puesta en escena comenzó con un batallón de soldados, a quienes
arropaba una enorme bandera de los Estados Unidos en la parte
trasera del escenario.
Finalmente, Lamar simuló un “tiroteo” para ir derribando a cada uno
de los combatientes. Claramente el show hacia una crítica y
denunciaba los últimos hechos de racismo vividos en el país
americano.
Luego de tan excéntrica puesta en escena, James Corden tomó la
batuta de la conducción del evento, para ir dando pie a los
galardonados y el resto de las presentaciones musicales.
Lady Gaga fue otra que
volvió para dejar atónitos a su público, la extravagante artista
apareció acompañada de un piano para interpretar “Joanne”,
un sencillo inspirado en su tía, quien era su modelo a seguir y que
falleció a causa de la enfermedad de lupus, posteriormente cantó el
tema por el cual estaba nominada “Million Reasons”.
El británico Sam Smith
también se presentó en los escenarios del Madison Square para
cantar su tema “Pray”, luciendo un sobretodo blanco, color
que utilizaron diversas celebridades en apoyo a la igualdad de
género.
Otras de las presentaciones más conmovedoras de la gala fue la
aparición de Pink, que
sorprendió en esta oportunidad por dejar las elevaciones de lado
para cantar su delicado tema, "Wild Hearts Can not Be
Broken" de su álbum de 2017, Beautiful Trauma.
Usando únicamente una blusa blanca y un jean, la cantante nominada
a la mejor actuación en solitario por su canción "What About
Us", estuvo acompañada por una Intérprete en lenguaje de señas
para dar ese toque emocional del performance.
Para llenar de colores y amenizar la velada al ritmo de los
noventas, Bruno Mars y
Cardi B lo hicieron
trasladando la temática de su más reciente video a los escenarios.
Los artistas cantaron, bailaron y pusieron a bailar con el remix de
“Finensse”, una de las presentaciones más movidas de la
noche sin duda.
Es importante resaltar que Bruno se llevó a casa seis gramófonos
gracias a su trabajo “24K Magic”, (mejor álbum general y
de R&B), su tema homónimo “24K Magic” (mejor
grabación) y el pegadizo “That’s what I like” (mejor
canción general y de R&B, y mejor actuación de R&B).
El sabor latino dijo presente en la noche más importante de la
música, Luis Fonsi y
Daddy Yankee llevaron
su famoso “Despacito” a tierras extranjeras.
Con una presentación que incluyó a la modelo Zuleyka Rivera, los
puertorriqueños hicieron historia cantando el tema completamente en
español y aunque no triunfaron en la categoría (mejor grabación del
año) en la que estaban nominados, rompieron las barreras del idioma
para a través de la música seguir apostando a la inclusión.
La chica originaria de Barbardos, Rihanna, también hizo lo respectivo
en esta pasada gala, además de ganar el premio junto a Lamar a la
mejor canción de rap, por "Loyalty", Riri actuó junto
DJ Khaled y Bryson Tiller para
interpretar “Wild Thoughts”.
La característica voz de Rihanna impregnó todo el recinto, que
junto a un vestido rosa brillante de Alexander Vahutier y una flor
en su cabello, le permitió demostrar lo sexy que puede ser y lo
sensual que puede bailar, así la critique por estar pasada de
peso.
En el espectáculo no faltó el pronunciamiento contra los abusos
sexuales y los derechos de las mujeres, por eso una Kesha repotenciada volvió a los
escenarios para cantar a favor de los movimientos Time´s
Up y Me Too, en donde tuvo un magnifico
acompañamiento vocal por parte de Camila Cabello,
Julia Michaels, Cyndi Lauper, Andra
Day y Bebe
Rexha.
Antecedida por un espectacular discurso de la actriz y cantante,
Janelle Moane en el que dijo: “También somos
hijas, esposas, madres, hermanas y seres humanos. Para aquellos que
se atreverían a intentar silenciarnos, les ofrecemos dos palabras:
#Timesup. Decimos que Time's Up está por la desigualdad salarial,
la discriminación o el acoso de cualquier tipo, y el abuso de
poder”, las cantantes entonaron la letra de “Praying”.
Otros de los grandes músicos participantes fueron Elton John y Miley Cyrus cantando juntos
Tiny Dancer. La también actriz apreció con un radiante
vestido largo vinotinto, mientras Elton tocaba el piano con un
traje con detalles brillante.
Una gala bastante emotiva, llena de buenos mensajes y un llamado a
la conciencia, para tocar el corazón de las personas a través de
algo tan influyente como la música, es lo que concluye esta entrega
de premios.
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