Biografía de Rabito
Juan Carlos Fernández, mejor conocido por su
nombre artístico Rabito, es un cantante y
compositor del género de música cristiana de origen argentino.
Nació el 23 de diciembre en Buenos Aires, Argentina. En los noventa
Rabito salta a la fama con el lanzamiento del álbum “Bajo la
luz de Dios”, con el que obtuvo gran éxito.
Inicios de Rabito en la Música
Rabito incursionó en la música cuando estaba en cuarto grado,
perteneciendo al coro de su escuela. A medida que fue creciendo se
interesó por tocar la batería, con la cual practicaba día y noche
porque era un instrumento que le gustaba.
A partir de esta afinidad por la batería, se introdujo en el género
rock, luego quiso formar su propia banda llamada “Los hampones”, la
cual se disolvió al poco tiempo ya que se interponía con sus
proyectos musicales.
Género musical
El estilo musical ha sido variado, pues desde sus inicios se
conoció como un cantante de género rock, pero luego esto cesó por
un episodio ocurrido después de volver de una de sus giras.
Posteriormente su estilo pasó a otro extremo, enfocándose en la
música cristiana, lo cual significó un cambio radical. No obstante,
en su melodías se puede escuchar la influencia del gospel que se
combina a la perfección.
Sus letras están enmarcadas por mensajes sacados de la Biblia, los
cuales logran adaptarse a la música para difundir las enseñanzas de
Dios y sus mensajes de salvación.
Trayectoria y Legado
Rabito tenía talento para la composición, siendo así como escribió
“Estrechándome”. Un amigo suyo pensó que era buena, así
que utilizó unos de sus contactos pertenecientes a la disquera E.
M./ Capitol, a quienes les gustó, por lo que le proporcionaron la
oportunidad para grabarla y después lanzarla al mercado.
No obstante, esa no fue la única pieza musical grabada por Rabito,
puesto que salieron al mercado discográfico temas como: “Amante
latino”, “Amarte”, “Las puertas de mi
corazón”, “Amarte una vez más”, “Mi querida
María”, “No me marcharé”, “Yo el idiota” y
“Amor no me abandones”, entre otros.
Por esta serie de producciones, Rabito alcanzó gran notoriedad con
la que emprendió una gira de presentaciones que lo llevaron a
presentarse en España, Inglaterra, Ecuador, Colombia y Venezuela.
Sobre estos shows musicales existe una anécdota referente a Rabito,
quien de regresó a su país de origen, se reunió con uno de sus
amigos que también había estado en la industria de la música, cuyo
padre había padecido de cáncer, pero que logró recuperarse haciendo
oraciones en el nombre de Cristo. Esta noticia causó gran conmoción
en la vida del cantante, quien desde entonces empezó a ver la vida
de otra forma, precisamente este suceso que marcó la carrera de
Rabito, ya que dio un giro de 360° a su carrera artística.
Con esta nueva perspectiva, Rabito comenzó a hacer alabanzas al
Señor, por lo que en los noventa, grabó su primer disco cristiano
con el nombre de “Bajo la luz de Dios” con el sello
discográfico de FonoVisa. Esta producción estaba compuesto de
nuevas canciones como: “Todo el mundo”, “Soy
señor”, “Tú y yo”, “De brazos caídos”,
“Creo en ti”, “Hoy tu pueblo señor”, “Me
gusta”, “Sígueme” y “Ciudadano de esta
tierra”. Cuando sus fans notaron este cambio radical, unos
decidieron lo apoyarlo pero otros no.
En junio de 1999, Rabito lanzó una nueva producción discográfica,
llamada “Pueblo de Dios”, la cual estuvo integrada por
diez sencillos, entre los que se pueden mencionar: “Balada del
solitario”, “Escucha mi oración”, “Vida es
hoy”, “Para siempre mi amor”, “Dale tu
amor”, “Amigo mío te contaré”, “Oye se” y
“Suenan las campanas”.
En noviembre de ese año llegó el turno para “Creciendo día a
día”, en el que se desprendieron las pistas musicales:
“Abrázame fuerte”, “Dios tengo paz”, “Sí
quiero, no quiero”, “El hombre necesita a Dios”,
“El poder de Dios”, “Hosanna”, “Niño, Jesús
te ama”, “Aquí está el hijo de Dios” y “Yo soy
Jesús”.
Para ese mismo mes el artista lanzó su cuarto álbum
“Sinceridad”, bajo el sello de la disquera De La Música.
Este disco estuvo conformada por un total de diez pistas musicales,
entre ellas: “En la eternidad”, “Dame dame”,
“La distancia”, “Sinceridad”, “Enamorado”,
“Gracias señor”, “Un mundo diferente”,
“Alegra mi vida”, “El amor de Dios nunca se
acaba”, y un remix titulado “Yo soy Jesús”.
En 2001, Rabito regresó con el álbum “Viva la vida”. El
disco estuvo cargado del mejor contenido bíblico expresado en las
letras de las canciones que lo integraron: “Que te
quiero”, “El amor mío”, “Vivir sin ti”,
“Mi corazón está de fiesta”, “Escuche la voz”,
“El hombre necesita a Dios”, “Le he prestado la mano a
Jesús”, “Yo probé tu amor”, “Sin palabras” y
“Me voy a la montaña”.
En septiembre de 2002, Rabito fue nominado para los Grammy Latinos.
Además realizó una gira durante 2003, con la cual recorrió Ecuador,
Puerto Rico, Costa Rica, México, Colombia, Panamá, Honduras, El
Salvador, Guatemala, Paraguay y Estados Unidos.
Después de la gira hizo un retorno triunfal con su CD inédito,
llamado “Mensajero del amor”, con el sello de FonoVisa, el
cual fue una compilación de las 15 canciones más emblemáticas de su
carrera en la música cristiana. Luego, el artista se dedicó a
predicar la palabra de Dios, por lo que se mantuvo alejado de la
música.
En febrero de 2017 Rabito volvió a su carrera con el disco
“Música nueva en el barrio”, el cual llegó cargado de diez
nuevos sencillos como: “Dice la historia”, “Mi pueblo
querido”, “Enamorarme”, “Tú tienes la
culpa”, “De blanco blanco”, “Ella”,
“Dueño de tu amor”, “Mi Jesús de amor”, “El
rap del mono” y una versión estilo mariachi de su anterior
éxito “Sinceridad”.
A lo largo de su trayectoria musical, Rabito realizó colaboraciones
con cantantes como Alberto Montessi, Yiye Ávila, Billy Graham, Luis
Palau y Carlos Anacondia, entre otros.
Vida Personal
Durante los años que estuvo dedicado a la música rock, Rabito se
casó con su novia Beatriz Fernández. Fruto de este matrimonio
nacieron tres niños llamados Carolina, Nicolás y Julián. Cuando el
cantante tuvo la epifanía sobre el cambio de su vida, su familia
también fue participe de la transición. Sin embargo, el estilo de
vida fue provechoso para ellos y decidieron hacer las
alabanzas.
De igual forma, el argentino se convirtió en el pastor de su
iglesia donde imparte mensajes sobre Dios, además le proporciona la
ayuda a los jóvenes advirtiéndoles sobre las drogas, prostitución y
alcoholismo, haciendo que se orienten hacia el camino del bien.
Desde hace varios años, el artista y su familia se encuentran
residenciados en Hollywood, California, Estados Unidos.