Biografía de Grupo Niche
El primer síntoma de que el GRUPO NICHE se estaba convirtiendo en
una leyenda, lo dio Jairo Varela, su director y Forjador, cuando
hace algunos años, la prensa de todo el mundo lo buscaba y nadie lo
encontraba en ningún lugar. La confirmación de la Leyenda, fue hace
poco. El pasado 27 de diciembre de 1996, en el marco del
Superconcierto de la Feria de Cali, ante más de 30.000 personas, el
nombre de Jairo, fue ovacionado incansablemente. De eso, guardan
testimonio todos los medios de comunicación. La leyenda sigue
vigente: a pesar de la situación jurídica del Maestro Jairo Varela,
el Grupo Niche logra en 1998 más de 120 presentaciones en más de
trece países.
La historia de la leyenda comenzó mucho antes, a mitad de 1985,
cuando en las recepciones de los más famosos hoteles, se
encontraban centenares de mensajes sin responder, pues él y su
GRUPO NICHE llegaban primero o después de los recados; su vida y
sus sueños empezaron a penetrar por el inmenso y luminoso túnel de
la fama y la gloria, y Varela no tuvo tiempo de despedirse de sus
amigos ni de sus amores. Cuando alguien en Colombia, quería sentir
al GRUPO NICHE, el único consuelo era escuchar en su casa los
discos de la agrupación, puesto que Varela y sus muchachos andaban
de correría por todo el mundo.
Desde entonces, su existencia comenzó a mitificarse, a adquirir
visos de celebridad y esos personajes, que le viven pisando la cola
a la inmortalidad, permanecen casi siempre en un mundo de neón del
que difícilmente pueden escapar; sin embargo, él lo hace con
frecuencia, se escapa raudo de las letras de molde en las que está
escrita la palabra Niche, se sale de sus discos y de sus caratulas,
y se sumerge en sus pensamientos, profundos, reflexivos y sólo se
dispone a crear. En cualquier momento, en una simple servilleta,
cuando plasma con paciencia esas sencillas palabras que ha de
entender el público, con esa melodía que él escucha en su mente,
con toda la orquesta ...
El tiempo libre se lo dedica a su familia, especialmente a sus
hijos, a quienes adora. También, a sus amigos de vieja y nueva
data. A los que aparecen, a todos aquellos que le prenden un afecto
que le permite reencontrarse con lo más íntimo de su ser. Más que
un compositor, Jairo Varela es un hombre sensible y un poco
introvertido, que prefiere decir en canciones lo que calle en la
cotidianidad. Y si habla, pone el dedo en la llaga: dispara
verdades sin contemplaciones sobre diversos temas ... La vida, la
Salsa, el amor, el fútbol, etc.
La primera vez que empezó a soñar, fue en 1980 en el piso 13 de un
edificio de la carrera Séptima con Calle 18 de Bogotá, tenía en su
cabeza centenares de aspiraciones, muchas canciones y una palabra
sencilla pero sonora que, seis años después, le transformaría su
vida: NICHE. Con esas cinco letras revolucionó la música salsa, le
imprimió categoría a la música hecha en Colombia hacia el exterior
y le demostró al mundo que Colombia era algo más que cumbias y
vallenatos; que también sabíamos tocar salsa y que podíamos
exportarla.
Por todo lo que ha significado Niche en el contexto salsero
latinoamericano, por su originalidad, por imponer un estilo
temático e interpretativo, y por elevar su categoría, Niche se ha
convertido en una leyenda viva de la salsa contemporánea.
¿QUIEN ES JAIRO VARELA?
El maestro Jairo Varela Martínez nació el 9 de diciembre de 1949 en
Quibdó, departamento del Chocó (Colombia), en el hogar formado por
el comerciante antioqueño Pedro Antonio Varela Restrepo y la
escritora y poetisa chocoana Teresa de Jesús Martínez Arce, quien
falleció hace poco, sumiéndolo en la más inmensa pena, pero también
recordándola como una mujer de mucha fortaleza que le imprimió
carácter a su vida.
Su primer contacto con la música se produce a los ocho años de
edad, en el barrio Roma de Quibdó en donde conformó la agrupación
"La Timba", que en esencia era una dulzaina, un bongo, unas maracas
y un güiro.
Su dualidad, talento artístico y habilidad comercial, la hereda de
su abuelo Eladio Martínez Vélez, considerado por los historiadores
como uno de los primeros industriales, de raza negra, en nuestro
país. De su abuelo aprendió también mecánica, ebanistería y
guitarra. Su recuerdo lo persigue desde que era un niño hasta
nuestros días. En conversaciones con amigos, Varela ha confesado
que su abuelo se le ha aparecido en hoteles y escenarios de todo el
mundo, como negándose a dejar de ser su guía espiritual.
Su padre y su madre se separaron cuando Marta, su hermana menor,
tenía tres años de edad. Jairo lo conoció a los 9 años y lo
recuerda como un hombre callado, taciturno, reservado y muy
trabajador.
Su madre, doña Teresa Martínez de Varela, fue una gran escritora y
nunca se opuso a su vocación musical, más bien le abonó el terreno
desde niño para cuando creciera se lanzara al difícil arte de hacer
canciones. "Desde el comienzo ella vio mis aptitudes. A los ocho
años me regaló una guitarra con el poco dinero que había.
Imagínense, hizo el esfuerzo de su vida para hacerme ese regalo",
recuerda Varela.
La infancia, la pubertad, la adolescencia y parte de su vida
adulta, transcurrieron en Quibdó, su pueblo natal, al que le ha
cantado en tantas oportunidades. Hacia la década de los 70, con su
madre y su familia, Varela decide cambiar su ambiente y se traslada
a Bogotá, en busca de nuevos y más sólidos rumbos. Sus primeras
composiciones fueron "Difícil" y "Atrato Viajero", ésta última la
grabó en el tercer disco de Niche en New York bajo el nombre de
"Atrateño", con relativo éxito.