Biografía de Alejo Durán
Alejandro Durán Díaz nació en El Paso (Cesar) un 9 de febrero de
1919. El Paso es un pueblo situado entre los ríos Cesar y Ariguaní,
habitado desde un principio por vaqueros, agricultores y tocadores
de tambor.
De niño, deambulaba por la sabana, trabajando desde los diez años
en la finca Las Cabezas. Cuando tenía 23 años, se fue metiendo en
las cosas que quería. Un día dejó la sabana que va a morir en los
playones de los ríos paseros, donde el ganado pasta, sestea y come
durante el verano, bajo el cuidado de los vaqueros.
Alejo descubre en ese entonces que la voz, el tono y los temas de
las canciones rústicas de aquellos vaqueros tienen el perfil de una
realidad imposible de cantarse de una manera diferente a como se
escucha fresca y temprana en la garganta de los guías de los
caminos, por eso tarde o temprano ocurriría lo que sucedió. Por
influencia familiar o razones laborales, dejó de ser vaquero para
quedarse haciendo cantos de los mismos que inicialmente oía y le
gustaban. En 1943, a los 26 años, saca el viejo acordeón de su tío
Octavio de un baúl, empieza a tocarlo y hacerlo sonar de acuerdo
con su tono de voz grave, ronca y parecida a la de su madre cuando
cantaba tamboras en diciembre.
Su primera canción fue un son llamado Las Cocas (Voz femenina de
coqui - el cocinero de los vaqueros). Durán fue quien extrajo al
acordeón las notas más sonoras y fuertes, acompañándolas con el
titubeo de su cabeza que llevaba siempre embutida en un sombrero
sabanero. Su monótona melodía, su estilo pausado, el modo de
interpretar, las entonaciones que salían de una sola hilera del
acordeón, se parecían a los primeros juglares que se dieron a la
tarea de descubrir los secretos escondidos de los primeros
instrumentos.
Empezaba su fama, y por ese entonces en El Paso ya se hablaba de
él, porque sus discos llegaban a la orilla del río.
Enamorado de las mujeres y también de la vida, Alejo tuvo 25 hijos
en 18 amores. En 1968 se realizó el primer festival de acordeones
"El Festival Vallenato" y allí fue elegido Rey, así fue como ganó
el primer festival y comprobó una vez más el amor que el pueblo de
Valledupar le tenía sin conocerlo. En 1979 el Instituto Colombiano
de Cultura decidió grabar en vivo música de los acordeoneros más
auténticos. Alejo estaba encabezando la lista. El 28 de abril de
1987, un jurado le negó el título a que tenía derecho en el
Festival, el de "Rey de Reyes"; pero lo reconoció el pueblo porque
sólo para él cantaba, componía, improvisaba el acordeón con ese
estilo de presencia misteriosa.
Quedarán para siempre en la historia del folclor bellas canciones
como "Pedazo de Acordeón" "Alicia Adorada" "039" "La Perra",
"Fidelina", entre tantos temas que interpretó con su estilo.
Gilberto Alejandro Durán Díaz murió el 15 de noviembre de 1989 en
la ciudad de Montería. Días atrás , un infarto le había deteriorado
su corazón y la diabetes lo fue postrando, para no recuperarse
más.
Hoy después de doce años de su partida, los homenajes y honores al
"Negro Grande" como se le conocía, no cesan, un seriado en la
televisión colombiana sobre su vida y obra, innumerables escritos,
reconocimientos, interpretaciones musicales y todo lo que recuerde
a uno de los más importantes juglares que ha tenido la música
vallenata en Colombia.
ALEJO DURAN: REY DEL PRIMER FESTIVAL VALLENATO (1968)
En el Primer Festival Vallenato, organizado desde la casona
colonial de Hernando Molina, se realizó en medio del escepticismo
de amigos y allegados de Alfonso López y Consuelo Araújonoguera,
quienes no creyeron que el certamen pudiera alcanzar el éxito que
finalmente tuvo.
En una improvisada tarima de madera se llevó a cabo el Primer
Concurso de Acordeoneros en el que compitieron: Luis Enrique
Martínez ("El Pollo Vallenato"), Ovidio Granados Durán, Emiliano
Zuleta Baquero y Alejandro Durán Díaz.
Un grueso grupo de sus seguidores daba por descontado que el Rey
sería el viejo Emiliano Zuleta, y bajo ese supuesto se lo llevaron
a celebrar anticipadamente durante toda la tarde, de tal manera que
por la noche, cuando llegó la hora de la competencia, Emiliano no
estuvo disponible durante los tres llamados que se le hicieron para
que subiera a competir. Esto motivó su descalificación y, aseguran
algunos, le despejó el camino a Alejo Durán, quien para ese
entonces no tenía el renombre y la popularidad que después lo hizo
famoso.
Alejo concursó con la puya "Mi pedazo de acordeón", el son "Alicia
Adorada", el merengue "Elvirita" y el paseo "La cachucha bacana".
El segundo lugar fue para Ovidio Granados y el tercero para Luis
Enrique Martínez. Fueron jurados: Rafael Escalona Martínez, Tobías
Enrique Pumarejo, Gustavo Gutiérrez Cabello, Jaime Gutiérrez de
Piñerez y Carlos H. Escobar.
Género musical
Alejo Durán es un interprete de la música vallenata. Es narrador de
historias y de anécdotas de los pueblos de la Costa Caribe de
Colombia. El juglar, el coplero de la memoria colectiva, que
rememora las historias en el folclor de su música. Dibuja en el
lienzo del amor sus notas de acordeón. Nos enseñó que la vida tiene
que ser aceptada y para soportarla debe ser poetizada y
cantada.
La relación de la música vallenata respecto del lenguaje poético
que la canta; se comprende la íntima correlación del juglar con la
tradición cultural de nuestros antepasados. La frecuencia con que
recurre a la memoria, a la niñez, a la familia, a la mujer, a los
amigos, a las fiestas populares, a los agüeros, a los ritos
sagrados o seculares, al trabajo en el campo –porque la mayoría son
de extracción campesina-, sus canciones parecen el anuncio de una
promesa. De ahí que el en ramaje de la lengua de su música es
tejido de tonos y ritmos, que le dan sentido a su historia y su
razón de ser.