La cantante Adele y la
disquera que trabaja junto a ella, se han visto en la necesidad de
posponer el trabajo discográfico planificado para 2014. El cambio
está motivado a que la solista presenta problemas de salud por su
adicción al cigarrillo.
Se presume que el nuevo álbum musical saldrá en 2015, pues de
acuerdo con los medios de comunicación ingleses, la británica ya
debió finalizar las grabaciones, sin embargo, siente una atracción
insaciable hacia el humo del tabaco que no le permite cumplir a
cabalidad con sus obligaciones.
XL Recordings se encuentra en una situación financiera
delicada, debido a que atrasar el nuevo disco se traduce en un gran
gasto. Aún asi, la droga ha afectado de forma severa la voz de la
estrella. Por lo que no existe otra salida.
Cabe destacar, no es la primera vez que la intérprete se enfrenta
con esta clase de trabas en su carrera musical. En el año 2011,
hubo que cancelar varios conciertos por la misma situación. Hace ya
un tiempo largo que la mujer viene luchando por dejar atrás la
nicotina y sus efectos posteriores.
Existen rumores que afirman que Adele está
asistiendo a sesiones de hipnosis, pues quiere superar esta etapa
de su vida. Esperemos le resulte.