Vanesa Martín logra entrar en el #1 de
la lista de ventas oficiales en España con su nuevo disco
"Siete veces sí". Este séptimo disco de la artista
malagueña, consigue un cuádruple histórico, ya que encadena cuatro
álbumes consecutivos que logran entrar directamente al número 1 en
la lista de ventas en su primera semana en el mercado.
Después de catorce años de carrera profesional, Vanesa Martín sigue
haciéndonos soñar con sus canciones. "Siete veces sí" es
su disco más internacional, nacido en Málaga, en casa, junto a los
también músicos y productores malagueños José Marín y Tony
Romero.
Una obra completa, de las que se disfrutan de principio a fin, de
las que se acompañan con café o vino mientras se repasan las letras
del libreto y se huele el cartón, como antes. Un disco con toda la
esencia de Vanesa, donde su inconfundible voz va dejando huella en
cada una de las canciones, mientras asaltan por sorpresa versos tan
únicos, que sólo podría haber escrito ella. Porque si habla de
“coger aire” y de la reflexión del camino nacen retóricas como
“¿Cuánto va a costarnos deshacernos del camino equivocado?” o
“Aprendí que quien se queda no es que sea mejor, es que tiene un
momento por vivir”. Porque desde los reproches de una relación que
acaba surge un “sabes que yo no he buscado en la arena el
lodo”.
Su exquisita lírica se enreda incluso en los ritmos funky de
“Tú no tienes que cuidarme”: “Que firmándole a la novedad
mi contrato fatal de la musa inmortal que me arrastra a vivir, yo
también te perdí”.
Un disco que guarda por un lado una intimidad muy poderosa y por
otro, la explosión de vivir cada minuto como si fuera el
último.
Una reflexión del camino, de la reafirmación constante de la propia
identidad, de las puertas a veces abiertas y otras cerradas, a raíz
de reinventar quizá los propios caminos. «Siempre me veían muy
andaluza para sonar en el norte y muy poco para el sur. Algunos de
mis compañeros cantautores me veían muy pop y la gente del pop muy
cantautora. Al final me acostumbré a estar en terreno de nadie, que
resultó que era el mío. Y en esa calle me he revuelto para sacar lo
mejor de mí cada día, que en el fondo es lo único que me llevaré al
otro mundo: el camino disfrutado».
«Siete veces sí, volvería a empezar. Siete veces sí, la música
sería destino».